Alcanza tus metas con una mentalidad positiva

¿Es alcanzable la mentalidad positiva? ¿Se puede establecer metas y seguir hacia ellas con entusiasmo y determinación? Sin lugar a duda este estado de la mente, tiene que ser cultivado a diario. Siempre hay altos y bajos, y buscamos un equilibrio ecuánime y sostenido de nuestra actitud. Pero la vida es esa constante ebullición de momentos con los cuales nos identificamos.

Queremos sentirnos felices y alcanzar prosperidad en las diferentes áreas de la vida: salud, profesión, relaciones, finanzas, espiritualidad, etc.

Somos muy soñadores y resueltos muchas veces al elegir las metas que queremos alcanzar. Y queremos transitar el camino al logro de las mismas con la menor dificultad posible. La buena noticia es que no siempre es tan fácil.

Se requiere una dosis de aceptación del estado en el que nos encontramos, a veces nos enfocamos en la polaridad: lo positivo y negativo, lo bueno y lo malo, cuando nuestra atención debería ir hacia la aceptación de cómo nos estamos sintiendo. A veces aflora el lado oscuro de uno mismo, momento ideal para invitar a esas emociones, a ese sentir y a esos auto-juicios a venir. A veces forzándonos a pensar en positivo para lograr el click que necesita nuestra mente.

Luego de la aceptación y ese auténtico mirarse a uno mismo, puede fluir la gratitud, excelente imán para generar de la vida una respuesta positiva. Prosperidad es estar consciente de lo que tengo para compartir y para dar, no lo que me falta. El estar presente, implica vigilar mis pensamientos, sí, y también saborear lo que me está sucediendo en ese preciso momento.

Concentrarse en las soluciones, todas las circunstancias nos presentan la posibilidad de mirar los problemas como oportunidades de crecimiento, de superar nuestros propios límites y aprender. Estamos tan enfocados en lo que queremos para nosotros mismos, que nos olvidamos de los demás.

A veces el preguntarnos cómo podemos ser útiles a los otros, nos genera ese estado mágico donde el reflejo inevitablemente se vuelve positivo y descubrimos que fue dando como logramos esa conciencia de cuán prósperos somos, de cuánto tenemos para dar. Entonces el lograr una meta se vuelve más, un estar abierto a la vida.